Sociólogo y politólogo.  Profesor de la Universidad Autónoma de Madrid (2003/2022)

Artículos propios del año 2025

Encrucijadas. Antonio Antón, en Nueva Tribuna(10/04/2025)


Reseña del libro “Encrucijadas. Para la democracia, las izquierdas y el feminismo” de Antonio Antón, con Prólogo de Albert Recio y colaboración de Carmen Heredero en el capítulo sobre feminismo.


Este libro digital y de libre acceso explica ese contexto socioeconómico, cultural y político. El texto se centra en el impacto social de esas dinámicas globales y los desafíos para el sistema democrático, las izquierdas sociales y políticas, especialmente la izquierda alternativa y, en particular, para el feminismo, como movimiento social y corriente cultural progresista y transformadora.


Tiene, sobre todo, un contenido analítico y valorativo de los hechos sociopolíticos más relevantes, y aborda algunas cuestiones teóricas y estratégicas para la transformación social. El análisis se realiza desde la teoría crítica, en particular de la sociología política, la sociología de los movimientos sociales, la acción colectiva y el cambio social y la sociología del género. Todo ello con un enfoque realista, relacional y sociohistórico.


Referencia web original:

https://www.nuevatribuna.es/articulo/cultura---ocio/libros-encrucijadas-democracia-izquierdas-feminismo/20250410185741237287.html

Identidades, interseccionalidad y universalismo. Antonio Antón, en Mientras Tanto, nº 244(1/04/2025)


Este ensayo tiene dos partes. La primera es analítica, con la valoración de la movilización feminista, joven e interseccional en este 8 de marzo. La segunda, al calor de esa experiencia, es más teórica y en ella trato el sentido de la identidad, la conveniencia de la identificación feminista, la identidad colectiva como inseparable del sujeto social, la combinación de identificaciones y el significado de la interseccionalidad.


Referencia web original:

https://mientrastanto.org/244/ensayo/identidades-interseccionalidad-y-universalismo/

Falacias del rearme y pacifismo. Antonio Antón, en Nueva Tribuna(30/03/2025)


En la justificación del plan de la UE de rearme o seguridad armada se utilizan diversas falacias o engaños, más allá de la confusión deliberada entre rearme, seguridad y protección. Selecciono varios párrafos:


“EEUU no está interesado en abandonar o liquidar la OTAN. Sigue siendo un instrumento útil para reforzar su hegemonía mundial. Lo que pretende, junto con su fiel aliado, el Reino Unido, es doble. Por un lado, subordinar a Europa en el cumplimiento del incremento de su aportación y gasto militar -hasta el 5% del PIB desde el actual 2%-.


Por otro lado, la reorientación de su función complementaria hacia sus propios intereses geopolíticos de su prioridad asiática del eje Indo-Pacífico, como ya lo hizo Biden con la OTAN en Afganistán y su alianza asiática (con Australia, Japón, Corea del Sur y Reino Unido). Tras esta tregua en Ucrania y su acceso a sus recursos, espera que Europa ejerza de tapón de Rusia a medio plazo ante su eventual colaboración estratégica con China, que es su adversario principal.


Por tanto, EEUU, con la actual administración trumpista y las siguientes demócratas, no se va de la OTAN; es un chollo para su primacía político-militar y económica; quiere que paguen más los europeos, compren su armamento y sean más disciplinados. Lo que no está a la vista en los gobiernos de la UE, por mucho que lo quiera Macron, es un plan para sustituir el liderazgo militar de EEUU, autonomizarse respecto de la jerarquía militar estadounidense con un brazo europeo de la OTAN o salirse de esa alianza transatlántica…


Sin esa perspectiva democrática y pacífica, lo que queda del plan de rearme o de seguridad armada, es el beneficio para las oligarquías del complejo militar industrial, sobre todo estadounidense, el autoritarismo de las élites gobernantes en un nuevo proceso de control social securitario, la subordinación de las mayorías sociales a una dinámica de reconstitución del ultraliberalismo neocolonial, precarizador, racista y extractivo.


El retroceso es para los derechos sociales, feministas y medioambientales y las condiciones habitacionales y laborales, así como para la degradación de la vida democrática y ética de las instituciones. Esa trayectoria armamentística va en contra de un arraigado principio europeo; lo hemos llamado ‘seguridad social’ y vital, en un marco de igualdad, libertad y solidaridad, no de rearme e imposición de la fuerza.


En definitiva, tras la terrible experiencia fratricida de las dos guerras mundiales, el nazi-fascismo y el colonialismo, el impulso europeo de sus valores democráticos y pacíficos podría constituir una aportación universalista a un mundo más seguro y pacífico. Pero el motor debe ser la propia activación cívica masiva, frente a la degradación autoritaria y regresiva que toma el poder establecido europeo. La población europea -y mundial- tiene la palabra.”


Referencia web original:

https://www.nuevatribuna.es/articulo/global/falacias-rearme-europa/20250330182533236947.html

Oposición al rearme. Antonio Antón, en Público (30/03/2025)


Las características del plan de rearme europeo y la valoración de que las prioridades cívicas no son el rearme o la seguridad armada, son la protección pública y la seguridad social. Selecciono varios párrafos:


“En conclusión, el plan de rearme, ahora llamado de seguridad, no resuelve la autonomía estratégica europea, ni la reindustrialización, ni la innovación en I+D. El plan financiero de la UE sólo exige ese 20% de procedencia comunitaria, cuando ahora ya lo es de un tercio. Se trasladan recursos desde la economía civil y la inversión social hacia la economía militar. El incremento del gasto militar se hace en detrimento del gasto social, medioambiental o productivo, cuando existen profundos déficits. En este ciclo histórico, habría que definir el objetivo estratégico, el para qué de esta ofensiva armamentística, sin suficiente legitimidad cívica…


Pero, aquí se mezcla la protección pública y la seguridad social, vital y medioambiental, de la orientación pacifista y de izquierdas, con la seguridad militar y, en todo caso, el sometimiento a un orden social e internacional de las oligarquías y tendencias imperiales.


La primera trayectoria constituye la tradición del modelo social europeo y democrático de derecho, con la prioridad del Estado de bienestar, la democracia y la cooperación, que en estas décadas ha mantenido el apoyo de entre dos tercios y el 80% de la población, y últimamente cuestionada por la ofensiva ultraliberal y reaccionaria.


La segunda es la actual estrategia militarista y autoritaria, con tensiones y reequilibrios entre superpotencias, con dos apuestas. Una, dada la hegemonía liberal-conservadora y el ascenso ultraderechista, la opción neoliberal y antisocial para una salida regresiva de la prolongada crisis socioeconómica, de casi dos décadas, solo paliada parcialmente, con profundas brechas sociales y desafección política. Otra, ante el ascenso multipolar, la pugna por la primacía mundial, que comparten las élites estadounidenses y europeas, frente a su declive.


Pero tienen un profundo problema de legitimidad pública, de distanciamiento con la actitud cívica mayoritaria, democrática y de progreso, frente a la involución autoritaria. De ahí los esfuerzos comunicativos, con la tergiversación del sentido del plan de rearme, camuflado bajo la seguridad -social- o la protección -pública-. Una de las principales tareas democráticas es restablecer la verdad, la confianza popular y el contrato social con la ciudadanía. Veremos si las élites dirigentes están a la altura.”


Referencia web original:

https://www.publico.es/opinion/columnas/oposicion-rearme.html

Interseccionalidad de identidades. Antonio Antón, en Nueva Tribuna (24/03/2025)


Clarificación del sentido de las identidades y su interacción que, junto con el carácter sociopolítico de la ciudadanía y el universalista como ser humano, es un tema relevante hoy para enfrentarse a la ola ultraconservadora. Selecciono varios párrafos:


“En este tiempo que hay una ofensiva ultraconservadora contra las identidades progresistas, descalificadas por las derechas extremas como woke, es imprescindible clarificar el sentido de las identidades, en particular la feminista, y su interacción multidimensional y relacional para reafirmar una dinámica igualitaria y emancipadora y superar el individualismo abstracto. Este texto trata del proceso de conformación de los sujetos sociales, con la combinación e interseccionalidad de sus identificaciones parciales, junto con el carácter sociopolítico de ciudadanía y el universalista como ser humano. Con similar enfoque, son interesantes las últimas aportaciones del catedrático Daniel Innerarity en El País, “Una defensa de las políticas de identidad” (5/02/2025) y “Contra el antiwokismo” (25/02/2025)…


En definitiva, las grandes identidades tradicionales, especialmente las derivadas de las relaciones machistas, la subordinación y precarización popular y los reajustes étnico-nacionales, con sus jerarquías valorativas, están en crisis y cambio. Hay una nueva pugna por su nueva conformación, su interrelación interna y su papel: desde la reacción defensiva y fanática de las anteriores identidades tradicionales, a la reafirmación en identificaciones parciales o fragmentadas. La construcción de nuevas identidades y, sobre todo, de los nuevos equilibrios, personales y grupales, de su heterogeneidad, es lenta e incierta y exige realismo, reconocimiento, tolerancia, negociación, mestizaje y convivencia; en resumen, respeto al pluralismo, capacidad integradora y talante democrático.


Por tanto, hay que superar cierto pensamiento posmoderno, fragmentario e individualista, así como la rigidez unificadora y esencialista de algunas teorías modernas y premodernas, sean asimilacionistas ante la diversidad o prepotentes respecto de las minorías. En ese sentido, la identidad feminista es fundamental para las mujeres, como expresión de su situación específica de discriminación y su demanda de igualdad y emancipación, a integrar con sus otras identidades en una pertenencia diversa y conectada con una identidad cívica, más general, democrática, igualitaria y solidaria, así como en una conducta e interacción prologada de carácter emancipador que constituye la identidad sociopolítica y cultural feminista, más universalista.”


Referencia web original:

https://www.nuevatribuna.es/articulo/sociedad/interseccionalidad-identidades/20250324092008236736.html

El rearme europeo, innecesario y contraproducente. Antonio Antón, en Público (20/03/2025) y Rebelión (22/03/2025)


Explica su sentido, sin más autonomía ni más seguridad, y la debilidad de su justificación, aunque haya un gran consenso político y mediático, junto con el dilema sobre en qué grado de subordinación o reequilibrio de poder se coloca Europa. Selecciono varios párrafos:


“La carrera armamentística en Europa se acelera, con una orientación común a la estadounidense, funcional para los objetivos compartidos de hegemonía occidental a nivel mundial. Mientras tanto, la guerra en Ucrania se está terminando y en Palestina y Oriente Próximo se guarda un consenso ante el genocidio, la limpieza étnica y la colonización por el Gobierno prooccidental israelí.


El problema de fondo es el sentido del rearme militar, la debilidad de su justificación, aunque hay un gran consenso político y mediático. El dilema es en qué grado de subordinación o reequilibrio de poder se coloca Europa, según los planes trumpistas, los forcejeos europeos y un difícil reajuste de la cobertura institucional…


Los dos grandes argumentos y objetivos para el rearme europeo aparecen cuestionados. El primero, esa militarización urgente no facilita la autonomía estratégica europea respecto del poderío militar estadounidense y su complejo militar industrial, del que dependen dos tercios de sus armas y su adquisición inmediata. A medio plazo, al menos una década, no hay capacidad industrial y tecnológica para garantizar esa autonomía militar respecto de EEUU. O sea, las élites dirigentes europeas no se replantean la salida de la OTAN, ni la insubordinación jerárquica del mando militar estadounidense. Tampoco hay suficientes motivos políticos en los gobiernos europeos para romper la alianza atlántica, ni siquiera para formar un ejército autónomo o un brazo europeo en la OTAN.


Por otra parte, está clara la existencia del suficiente gasto militar europeo, superior al de Rusia, para demostrar capacidad disuasoria, incluso nuclear. El rearme europeo tampoco sirve para mejorar su competencia económica y tecnológica, a la que aspiraba el plan Draghi.


Por tanto, la declamada autonomía estratégica europea no va en serio. Las élites dirigentes extreman la amenaza rusa y el desamparo estadounidense para negociar una recolocación menos desfavorable en la alianza occidental, imprimir una dinámica prepotente, frenar la trayectoria democrática y social europea, así como intentar legitimarse ante su fiasco político y doctrinal. En todo caso, haciendo de la necesidad virtud, pretenden dar la apariencia de disminuir su dependencia de EEUU, pero sin romper con Trump y su modelo expansionista y autoritario.”


Referencia web original:

https://www.publico.es/opinion/columnas/rearme-europeo-innecesario-contraproducente.html


Referencia web de la versión ampliada en Rebelión, "Contra el rearme europeo" (22/03/2025):

https://rebelion.org/contra-el-rearme-europeo/

La identificación feminista. Antonio Antón, en Nueva Tribuna(15/03/2025)


La pertenencia e identificación colectivas se van formado a través de las relaciones sociales, sobre la base de una práctica social prolongada, una interacción relacional. El componente social de la interacción humana es el principal para forjar el reconocimiento y las pertenencias grupales e individuales y dar soporte a la acción colectiva. Selecciono varios párrafos:


“Estos dos conceptos, identidad e interseccionalidad, han recobrado relevancia en el pensamiento social y, en particular, para la teoría feminista y el discurso étnico-nacional o antirracista. Hacen referencia a algunas características de los grupos sociales, su reconocimiento y su relación, que conforman su actitud sociopolítica en un contexto de grandes transformaciones sociales. Por separado pero, sobre todo, juntos, ayudan a explicar la formación de nuevos actores (o sujetos), individuales y colectivos, y sus procesos participativos y colaborativos en el marco del cambio sociocultural y político. Conllevan una experiencia relacional diversa que se combina con lo común de la interacción humana, al mismo tiempo que con su pluralidad…


En la medida que se mantenga la desigualdad y la discriminación de las mujeres, sus causas estructurales, la conciencia de su carácter injusto y la persistencia de los obstáculos para su transformación, seguirá vigente la necesidad del feminismo, como pensamiento y acción específicos. Y su refuerzo asociativo e identitario, inclusivo y abierto, será imprescindible para fortalecer el sujeto sociopolítico y cultural llamado movimiento feminista y su capacidad expresiva, articuladora y transformadora. No es tiempo de un postfeminismo abstracto, sino de un amplio feminismo crítico, popular y transformador frente a la pasividad o la neutralidad en este conflicto igualitario-emancipador. Eso sí, con una perspectiva integradora y multidimensional que le haga converger con los demás procesos emancipatorios. Igual ocurre con otros movimientos sociales progresistas.”


Referencia web original:

https://www.nuevatribuna.es/articulo/sociedad/8m-igualdad-derechos-identificacion-feminista-politica/20250315121030236441.html

Rearme y oportunismo. Antonio Antón, en Rebelión (12/03/2025) y Mientras Tanto (1/04/2025)


“Trato cuatro cuestiones controvertidas sobre el análisis y las estrategias políticas para un cambio profundo, que suscitan debates en las izquierdas y sus tradiciones teóricas, dejando al margen las diferencias de contextos: el concepto de régimen de guerra, el significado del malmenorismo, el error de la prioridad anti reformista y la crisis centrista proveniente, sobre todo, por la derecha autoritaria.


Parto de la relevancia de un asunto fundamental, la construcción procesual y conflictual del sujeto colectivo transformador, capaz de modificar la relación de fuerzas con los poderosos. En ese sentido, es una idea sencilla y con gran carga política, la expuesta por Lenin, en tiempos convulsos, sobre que la “acción independiente de las masas”, respecto de la gestión institucional y los aparatos de las corrientes oportunistas, es una condición necesaria pero no suficiente para el cambio radical…


Ante las amenazas de seguridad y de cambios de estructura de poder, las relaciones institucionales antagónicas terminan por dirimirse a través de conflictos político-militares, con reequilibrios de hegemonía político-cultural y sometimientos, más o menos violentos y coercitivos. Se puede reinterpretar aquello de ‘socialismo o barbarie’, ahora también en el plano mundial y con la (in)sostenibilidad del planeta al fondo.


En estos momentos, a pesar del rearme militar y el creciente discurso belicista, las sociedades europeas, las mayorías sociales, no están inmersas -todavía- en una contienda armada generalizada; no se pueden hacer paralelismos con el nazi-fascismo de los años cuarenta, aunque haya ciertos parecidos con las décadas de pugna interimperialista precedentes y posteriores a la primera guerra mundial. Sin ánimo de ingenuidad histórica, todavía hacen falta tiempo y condiciones para la tercera guerra mundial o un conflicto armado generalizado en el núcleo de Europa. Hay tendencias hacia ello y hay que ampliar en la sociedad una acción y cultura pacifistas pero, al mismo tiempo, hay que criticar la dinámica del miedo y la instrumentalización derechista de la llamada crisis existencial europea, con una situación de preguerra que conduce al rearme, la hegemonía de los grupos de poder, la degradación ética y democrática y la justificación del desmantelamiento del Estado de bienestar europeo.”


Referencia web original:

https://rebelion.org/rearme-y-oportunismo/


Referencia de la edición en Mientras Tanto nº 244 (1/04/2025):

https://mientrastanto.org/244/de-otras-fuentes/rearme-y-oportunismo/

Un 8 de Marzo joven e interseccional. Antonio Antón, en Nueva Tribuna (10/03/2025)


La gran vitalidad feminista de este 8M, el análisis de distintos estudios demoscópicos que señalan el avance y la consolidación de las posiciones igualitarias en las relaciones de sexo/género y el carácter más multidimensional, interseccional e inclusivo del presente feminismo. Selecciono varios párrafos:


“Este 8M ha vuelto a demostrar la gran vitalidad del movimiento feminista, con múltiples manifestaciones, concentraciones y actividades en las principales ciudades españolas (y del mundo), en defensa de los derechos de las mujeres, de su libertad e igualdad respecto de los varones. A pesar de algunas divisiones, sus principales características continúan siendo su capacidad unitaria, su diversidad y su coherencia con un feminismo transformador, crítico, autónomo y popular…


Ese avance feminista mayoritario se ha combinado con una ola de indignación cívica por esas brechas y desigualdades sociales, con una apuesta sociopolítica más progresista o de izquierdas, así como con una exigencia personal y colectiva por unas relaciones sociales y laborales igualitarias, incluidos los cuidados, por la libertad sexual y contra las violencias machistas, lo que conforma la cuarta ola feminista.


La discriminación femenina y de los colectivos LGTBIQ+ afecta a una amplia y profunda segmentación por sexo/género y opción sexual y sus desigualdades de estatus, reconocimiento y poder en ámbitos como las relaciones laborales, sexuales y de género o la paridad representativa. Afecta, cada vez más, a dos aspectos que han cobrado relevancia en este 8 de marzo.


Por un lado, las desigualdades por motivos étnico-culturales o de raza, con particular impacto en las personas inmigrantes, con un fuerte crecimiento en España, y la necesidad de priorizar la defensa de sus derechos e intereses; se trata de desarrollar una cultura antirracista, decolonial e intercultural, clave para la integración y convivencia en las clases populares españolas y europeas.


Por otro lado, la ofensiva política, relacional y cultural de carácter reaccionario y ultraconservador de las nuevas fuerzas de extrema derecha que pretenden hacer retroceder los derechos feministas hacia un modelo tradicional y patriarcal de subordinación femenina; requiere una trayectoria democratizadora y antiautoritaria, común a otras fuerzas sociales.


De ahí, el carácter más multidimensional, interseccional e inclusivo del presente feminismo, abarcando toda la diversidad y complejidad de la acción emancipadora, con la conformación de un proceso unitario y complementario de problemáticas singulares, sujetos colectivos e identificaciones parciales, en una dinámica cooperativa de respuesta y, al mismo tiempo, de conjunción y superación, en un proceso identificador feminista más global e interrelacionado respecto de las especificidades y la diversidad de cada dinámica particular, que evite sus efectos disgregadores.”


Referencia web original:

https://www.nuevatribuna.es/articulo/sociedad/8-marzo-joven-interseccional/20250310115427236268.html

La doble particularidad española. Antonio Antón, en Mientras Tanto nº 243 (marzo 2025)


Ensayo sobre la excepcionalidad de las derechas e izquierdas españolas: la amenaza de la ola postdemocrática, el carácter antipluralista en las derechas, la capacidad estratégica de las izquierdas y la igualdad y la democracia como identidad de las izquierdas. Transcribo su introducción:


“En comparación con otros países europeos, en España se da una doble excepcionalidad respecto de sus principales agentes sociopolíticos e institucionales, las derechas y las izquierdas, con sus correspondientes bases socioelectorales y grupos de presión.


Conviene analizar sus rasgos específicos, que explican su mutua relación y las características del particular proceso sociopolítico e institucional, para valorar el alcance de este ciclo de progreso y prever su prolongación renovada o su cierre, según las diferentes apuestas estratégicas. Avanzo unas definiciones básicas de esa singularidad política: el carácter antipluralista de las derechas, y la potencial capacidad democrática de las izquierdas y fuerzas progresistas.


Es pertinente un análisis realista y abierto que responda al interrogante vital a medio plazo —las elecciones generales próximas— sobre la posibilidad de que las derechas estatales (PP y Vox) derroten a las fuerzas progresistas e impongan un ciclo regresivo y autoritario hacia una democracia iliberal.


La respuesta prudente, desde la incertidumbre de cierto escepticismo analítico, es que no lo sabemos con certeza. La valoración justa, sin embargo, es que las fuerzas progresistas pueden ganar a las derechas autoritarias, lo que conlleva una subjetividad activa de compromiso democrático y por la justicia social y la igualdad. Se trata de combatir cierto fatalismo o resignación.


Existe un panorama exterior desfavorable, con un fuerte empuje imperialista y una ola derechista también en Europa. Es pertinente una respuesta realista y abierta al interrogante vital a medio plazo —las elecciones generales próximas— sobre si las derechas estatales (PP y Vox) van a derrotar a las fuerzas progresistas y se van a imponer en España con un ciclo regresivo y autoritario hacia una democracia iliberal.


En los dos próximos años se pueden introducir diversas variables. Las estrategias y actuaciones de las respetivas representaciones políticas van a tener un papel importante en la consolidación (o no) de sus respectivos campos sociales y electorales y su reflejo institucional. Pero, más allá de cada coyuntura, podemos avanzar el análisis de la trayectoria y el carácter específicos de cada bloque social y político que están configurando su interacción y su conflicto estratégico.


Se ventila la culminación de la actual etapa y el sentido de la nueva respecto de la gobernabilidad en España y la recomposición de los liderazgos progresistas. Pero, especialmente, se decide el alcance del bienestar social y democrático de la población y el modelo de país que está en entredicho. Se trata de partir de la realidad de las tendencias sociales y culturales, en este contexto económico-político, estimular un horizonte o unas aspiraciones de progreso, en contraposición de una perspectiva reaccionaria, y favorecer una dinámica transformadora progresista.


Antes de entrar en esas características de las derechas y las izquierdas y aportar algunas claves interpretativas, sintetizo el marco internacional que condiciona el sistema político y la propia sociedad española.”


Referencia web original:

https://mientrastanto.org/243/ensayo/la-doble-particularidad-espanola/


Se reedita en 'Voces Críticas', Boletín sociocultural de Acción en Red - Madrid (18/03/2025):

https://mailchi.mp/6373af0a1b37/boletn-voces-crticas-n-50-marzo-2025

¿Adónde va Europa?. Antonio Antón, en Público (1/03/2025) y Rebelión (7/03/2025)


El refuerzo de la primacía estadounidense, con mayor subordinación europea, el sentido del incremento del gasto militar y la insuficiente e imprescindible autonomía europea. Selecciono varios párrafos:


“Tras la pacificación y el reparto imperialista de Ucrania, el control neocolonial de Palestina y Oriente Próximo y la mayor subordinación europea -sin disolver la OTAN, sino de incrementar el mando de EEUU, ya evidente- el plan trumpista consiste en controlar Asia-Pacífico, aislar a China y doblegar su poderío económico. Se trata de seguir debilitando a Rusia y los BRICs, con grandes reservas de materias primas estratégicas y, particularmente, reforzar las tendencias reaccionarias y ultraderechistas frente a los países con gobiernos de izquierda (México, Colombia, Brasil, Sudáfrica…) que en América Latina, patio trasero de EEUU, y África, colonizado por una Europa en retirada, no tienen incentivos prooccidentales.


Europa quedaría sometida a esa función subordinada y seguidista de los intereses geopolíticos de EEUU, con su sistema ultraderechista de división social y autoritarismo político; se produciría una recomposición de sus élites dirigentes, con mayor peso ultra, con una nueva misión belicista de acompañamiento al nuevo imperialismo iliberal y expansionista estadounidense, así como la reducción de su Estado de bienestar, redistributivo y protector.


El reto para las élites liberal-conservadoras europeas es inmenso. El campo para las ultraderechas ha quedado abierto como reacción racista y excluyente de la inmigración, con la mirada neocolonial al fondo, y frente a los derechos feministas y la imprescindible reforma ecologista, mientras las élites dirigentes mantienen cierto impasse, incapaces de hacer frente a la contraofensiva ultraconservadora e iliberal, con la tendencia hacia la derechización como falsa vacuna.


El desafío para las izquierdas es tremendo, y la responsabilidad también pasa a la sociedad civil. El dilema está entre autoritarismo regresivo e imperialista o democracia social, cooperativa e igualitaria. La población europea dirá.”


Referencia web original:

https://www.publico.es/opinion/columnas/europa-2.html


Referencia web de la versión ampliada en Rebelión (7/03/2025):

https://rebelion.org/adonde-va-europa/

La capacidad democrática de las izquierdas. Antonio Antón, en Rebelión (25/02/2025) y Nueva Tribuna (25/02/2025)


Análisis de la larga experiencia democrática y de reforma social de las izquierdas, sus dos corrientes principales: moderada y transformadora, y la igualdad y la democracia, como identidad de las izquierdas. Selecciono un par de párrafos:


“En una primera parte he analizado las fuertes tendencias ultraderechistas en el marco internacional, que condicionan el sistema político y la propia sociedad española, así como el carácter antipluralista de las derechas españolas, sus ventajas estructurales y sus debilidades políticas. Ahora me centro en la respuesta estratégica de las izquierdas y su capacidad democrática…


En definitiva, el futuro está abierto. Hay que jugar el partido con tenacidad y sabiduría. Las derechas cuentan con muchas ventajas estructurales y de poder fáctico y se apoyan en los fuertes vientos derechistas del exterior. Las izquierdas y fuerzas progresistas tienen a su favor la potencialidad de la articulación democrática de la mayoría social, a través de la reformulación de su contrato social y su proyecto de progreso, y contando con la experiencia popular, por medio de la activación cívica y la pugna cultural.

Las élites políticas progresistas, y también las sociales y culturales, en sus dos vertientes, la moderada o socialista y la transformadora o alternativa, además de las fuerzas nacionalistas, tienen (tenemos) una particular responsabilidad en este tiempo transitorio. El acierto estratégico en un proyecto común mínimo, aun con su autonomía política particular, el reequilibrio interno de mayor firmeza reformadora y la capacidad colaborativa y de vertebración popular y democrática van a ser determinantes para la prolongación o el cierre del ciclo institucional de progreso, así como para la recomposición de los liderazgos y estructuras partidarias. La realidad tendrá la palabra.”


Referencia web original:

https://rebelion.org/la-capacidad-democratica-de-las-izquierdas/


Referencia web de la versión de Nueva Tribuna (25702/2025):

https://www.nuevatribuna.es/articulo/actualidad/capacidad-democratica-izquierdas/20250225191150235820.html

La ola postdemocrática de las derechas. Antonio Antón, en Nueva Tribuna (20/02/2025)


Primera parte del ensayo sobre el carácter singular de las derechas y las izquierdas españolas. Selecciono varios párrafos:


“Asistimos a la instrumentalización por las derechas políticas de estas instituciones del Estado que, combinados con la otra debilidad, la escasa cultura democrática de las direcciones del Partido Popular y, especialmente, del ultraderechista VOX, nos ofrecen un relevante riesgo de involución iliberal.


Su carácter antipluralista es evidente: apropiación del poder del Estado, al creer que las instituciones son suyas, y ofensiva mediática descalificadora, con la acusación de ilegitimidad del Partido Socialista y las formaciones progresistas, sobre todo, cuando, contra su previsión, consiguen gobernar con mayoría parlamentaria y tener una influencia institucional significativa.


Esa tendencia iliberal hunde sus raíces en la propia fundación del Partido Popular que integra sectores franquistas y ultraderechistas hasta que una parte se escinde en VOX; continuó con la prepotencia del presidente Aznar, y se ha recrudecido con especial virulencia estos años de resistencias cívicas, emplazamientos democratizadores, reforma sociolaboral y Gobiernos de coalición progresista.


Pero esta composición y tradición iliberal converge ahora con la nueva ola postdemocrática frente a la crisis múltiple: socioeconómica, institucional, geopolítica, ambiental, sociocultural... Se refuerza la amenaza a los fundamentos democráticos, de igualdad y cohesión social y territorial, desde un nacionalismo centralista y prepotente, junto con el neoliberalismo regresivo y el conservadurismo sociocultural…


Por tanto, las derechas estatales tienen una ventaja estructural derivada de la ausencia de una ruptura democrática en sus inicios o de reformas profundas posteriores que democratizasen suficientemente esos aparatos de poder, funcionales para su preeminencia política. Y utilizan abiertamente ese control o convergencia con grupos de poder económico, institucional y mediático, condicionando los propios mecanismos democráticos y representativos. La tentación hacia una democracia vaciada e iliberal, a través de medios ilegítimos, está servida: acoso al gobierno progresista… sea como sea y hasta su desalojo final... para imponer su proyecto regresivo y autoritario.


Sin embargo, esa prepotencia derechista también constituye su punto débil: va en contra de los intereses de la mayoría social y de la masiva cultura democrática y solidaria de la ciudadanía, que constituyen la base sociohistórica y estructural para impedir una involución reaccionaria. Su peso se determinará por el comportamiento y la orientación de las fuerzas progresistas. En una segunda parte, analizaré la respuesta estratégica de las izquierdas y su capacidad democrática."


Referencia web original:

https://www.nuevatribuna.es/articulo/global/ola-postdemocratica-derechas/20250220200025235715.html


Referencia de la versión editada en Rebelión (24/02/2025):

https://rebelion.org/la-ola-postdemocratica-de-las-derechas/

Derechas antipluralistas, izquierdas democratizadoras. Antonio Antón, en Público (19/02/2025)


Análisis de la singularidad de las derechas y las izquierdas españolas, en la perspectiva de la continuidad (o el cierre) de este ciclo de progreso y la victoria (o derrota) sobre las derechas reaccionarias. Selecciono varios párrafos:


“En comparación con otros países europeos, en España se da una doble excepcionalidad respecto de sus principales agentes sociopolíticos e institucionales, las derechas y las izquierdas, con sus correspondientes bases socio-electorales y grupos de presión. Avanzo unas definiciones básicas de esa singularidad política: el carácter antipluralista de las derechas, y la potencial capacidad democrática de las izquierdas y fuerzas progresistas.


Existe un panorama exterior desfavorable, con un fuerte empuje imperialista y una ola derechista también en Europa. Es pertinente una respuesta realista y abierta al interrogante vital a medio plazo -las elecciones generales próximas- sobre si las derechas estatales (PP y Vox) van a derrotar a las fuerzas progresistas y se van a imponer en España con un ciclo regresivo y autoritario hacia una democracia iliberal.


La respuesta prudente, desde la incertidumbre de cierto escepticismo analítico, es que no lo sabemos con certeza. La valoración justa, sin embargo, es que las fuerzas progresistas pueden ganar a las derechas autoritarias, lo que conlleva una subjetividad activa de compromiso democrático y por la justicia social y la igualdad. Se trata de combatir cierto fatalismo o resignación…


En definitiva, el futuro está abierto. Hay que jugar el partido con tenacidad y sabiduría. Las derechas cuentan con muchas ventajas estructurales y de poder fáctico y se apoyan en los fuertes vientos derechistas del exterior. Las izquierdas y fuerzas progresistas tienen a su favor la potencialidad de la articulación democrática de la mayoría social, a través de la reformulación de su contrato social y su proyecto de progreso, y contando con la experiencia popular, por medio de la activación cívica y la pugna cultural.


El acierto estratégico en un proyecto común mínimo, aun con su autonomía política particular, el reequilibrio interno de mayor firmeza reformadora y la capacidad colaborativa y de vertebración popular y democrática van a ser determinantes para la prolongación o el cierre del ciclo institucional de progreso, así como para la recomposición de los liderazgos y estructuras partidarias. La realidad tendrá la palabra.”


Referencia web original:

https://www.publico.es/opinion/derechas-antipluralistas-izquierdas-democratizadoras.html

Dilemas de la izquierda alternativa. Antonio Antón, en Mientras Tanto nº 242 (1/02/2025)


Ensayo completo del que se han publicado varios extractos y que trata sobre las perspectivas del año 2025, con un año de transición para consolidar el campo socioelectoral propio, el declive representativo de Sumar, las estrategias alternativas y sus dificultades, una trayectoria fallida, sin autocrítica ni reconsideración, la necesidad de respeto al pluralismo y colaboración en la izquierda alternativa, el incumplimiento de sus expectativas y su remontada necesaria. Selecciono varios párrafos finales:


“En conclusión, está abierta la encrucijada de las izquierdas y la continuidad de un proyecto de progreso en una doble perspectiva: si se termina este ciclo sociopolítico e institucional de progreso, asentado en la participación cívica de estos quince años y un inicial espacio socioelectoral de más de seis millones de personas; o bien, si se reproducen suficientes energías sociopolíticas, partidarias e institucionales para reafirmar una senda democratizadora y de justicia social, con una representación política renovada y relegitimada.


En esta segunda hipótesis existe un doble plano. Por un lado, si será capaz el bloque democrático y plurinacional de reforzarse y ganar a las derechas en el proceso electoral clave de las elecciones generales (y municipales y autonómicas) de 2027 —si no se adelantan—. Por otro lado, si la izquierda alternativa, la pata imprescindible y más frágil de ese conjunto, podrá consolidarse, ampliarse y facilitar la necesaria colaboración de todo su conglomerado de grupos políticos y la propia izquierda social y los movimientos sociales progresistas, para poder configurar unas alianzas con mayor peso de las izquierdas consecuentes en ese bloque democrático.


Por tanto, para la izquierda transformadora se trata de combinar su propio proyecto autónomo y unitario, ya difícil, y que constituye un auténtico reto para su representación política actual, con la colaboración con el nacionalismo periférico y el Partido Socialista…


En consecuencia, junto con mayor participación cívica, es fundamental la persistencia de esa izquierda alternativa con suficiente representación electoral y capacidad de empuje reformador progresista. Veremos si las izquierdas sociales y políticas encuentran —encontramos— la salida adecuada a esta encrucijada. La recomposición de sus liderazgos dependerá de ello.”


Referencia web original:

https://mientrastanto.org/242/ensayo/dilemas-de-la-izquierda-alternativa/

El imperio iliberal contraataca. Antonio Antón, en Público (31/01/2025)


Los dos rasgos principales del trumpìsmo, el imperial expansionista y el iliberal, así como la relación entre dominación y guerra cultural, la prepotencia nacionalista del ‘América primero’ y el hegemonismo oligárquico y autoritario. Selecciono varios párrafos:


“Trump ya es presidente de los EE. UU. Con él gobierna el trumpismo, con el dominio no solo del poder ejecutivo (y militar) sino también con pleno control del poder legislativo y judicial. El repetido slogan de ‘América primero’, desde su prepotencia imperial, define su estrategia de subordinar el resto de intereses de los países del mundo y sus poblaciones a su beneficio propio, incluidos los de la propia Unión Europea.


Se inicia un nuevo ciclo histórico con esos dos rasgos principales: el refuerzo de la dominación imperialista de las élites estadounidenses, y el vaciamiento de la democracia y los propios valores liberales e ilustrados. Permanece el (ultra)liberalismo económico como doctrina y dinámica que ampara un paso más en la desregulación económica, la desprotección pública y el predominio oligárquico privado frente al bien común; y se debilita el liberalismo político y la propia institucionalidad democrática como contrapoder soberano de la población para definir el contrato social -o constitucional- desde el que orientar las políticas públicas y la regulación de los poderes privados…


Habrá que ver las respuestas, las tensiones y los nuevos equilibrios. Por un lado, en las relaciones internacionales en el conflicto geopolítico y económico con China y los países BRICs, con la particularidad de la dependencia geoestratégica europea, sin apostar claramente por un polo relevante de modelo social y valores democráticos. Por otro lado, analizar las capacidades de resistencia cívica y democratizadora frente a la involución regresiva y autoritaria por parte de las propias poblaciones del Sur y del Norte, incluso del propio EEUU, y en especial de las izquierdas latinoamericanas -empezando por México- y europeas -comenzando por España-. Veremos.”


Referencia web original

https://www.publico.es/opinion/columnas/imperio-iliberal-contraataca.html


Referencia web de la versión en Rebelión (7/02/2025):

https://rebelion.org/el-imperio-iliberal-contraataca/


Referencia web de la reedición en Mientras Tanto nº 243 /1/03/2025):

https://mientrastanto.org/243/de-otras-fuentes/el-imperio-iliberal-contraataca/

La encrucijada de Sumar. Antonio Antón, en Nueva Tribuna (23/01/2025) y Rebelión (17/01/2025)


El declive electoral de la izquierda alternativa, los retos e incertidumbres de Sumar y la necesidad de un refuerzo orgánico plural y democrático. Selecciono los párrafos finales:


“Por tanto, para la izquierda transformadora se trata de una política doble de consolidar el llamado bloque democrático y plurinacional, con mayor peso de su izquierda frente al hegemonismo continuista del Partido Socialista. Éste tiene dificultades para la geometría variable, vía PNV/CC/Junts que no es suficiente, o con pactos con la derecha que ésta desecha por su estrategia global de acabar con el sanchismo.


Para ello es contraproducente la estrategia insuficientemente inclusiva de la dirección de Sumar, con la marginación de Podemos y la infravaloración de la dimensión de su base social. Sería imprescindible una estrategia unitaria de colaboración y acuerdo político básico, con regulación de la pluralidad real, y en la perspectiva de una alianza, al menos electoral, a medio plazo, de cara a 2027.


Habría que desechar la estrategia divisionista del aislamiento y marginación de la formación morada y evitar el ascenso del sectarismo mutuo, con consecuencias de desgaste para ambas fuerzas y beneficio relativo para el PSOE (y los nacionalistas de izquierda… y la abstención), y en último término, con desventajas para el conjunto progresista frente a las derechas.


Pero esa reconsideración unitaria, de momento, no está presente en el equipo dirigente de la coalición Sumar, excepto en Izquierda Unida, más sensible por las limitaciones del proyecto y preocupada por ese escenario futuro.


El problema es que, con unos cambios de orientación política y liderazgo mínimos, Movimiento Sumar, como referente del conjunto, no aborda la cuestión de fondo: una orientación política más exigente, con una perspectiva integradora y unitaria de todo el espacio alternativo. Así, últimamente, se han hecho gestos críticos hacia el Partido Socialista por su rémora en algunas medidas básicas apalabradas, como la reducción de jornada laboral, o aceptan la coordinación de la Mesa de partidos.


Pero esas modificaciones siguen siendo insuficientes para avanzar en la recuperación político-electoral ante dos hechos fundamentales: su credibilidad transformadora o de utilidad sustantiva para la gente, y su desconsideración hacia Podemos, que sigue siendo el elefante en la habitación, que se desprecia de cara a la perspectiva ineludible de un frente común para 2027.


Sumar, el conjunto de la coalición y particularmente el Movimiento Sumar, está en una encrucijada, con grandes dificultades en su trayectoria. Veremos si acierta con la salida, necesariamente unitaria con Podemos, y se avanza en el camino para reorientar y recomponer todo el espacio alternativo.”


Referencia web original:

https://www.nuevatribuna.es/articulo/actualidad/encrucijada-sumar/20250123182903234648.html


Referencia web de la versión inicial en Rebelión (17/01/2025):

https://rebelion.org/la-encrucijada-de-sumar/

Tras una trayectoria fallida, renovación. Antonio Antón, en Nueva Tribuna (15/01/2025)


Tras la doble evidencia del declive electoral de Sumar y su incapacidad para articular todo el espacio alternativo, se analizan sus causas políticas y de liderazgo, y se apuesta por la renovación, con una política negociada y una representación inclusiva, democrática y plural. Selecciono varios párrafos:


“Se ha formado un marco orgánico y discursivo, dominante en los medios, poco respetuoso con el reconocimiento del pluralismo, debido a la prioridad política y orgánica de sustituir a Podemos como fuerza dirigente y de articular una nueva primacía organizativa de la mano de Sumar. Se justifica por el supuesto impacto positivo superior de una política más moderada, posibilista y colaboradora con el Partido Socialista…


Esa dificultad unitaria se basa en el fundamento, insistente en el ámbito mediático y en la justificación de los representantes de Sumar, de que es prioritaria una estrategia moderada para ensanchar el electorado y poder hacer una política útil de reformas progresistas. Evidencia que ha quedado deslegitimada por el declive representativo y el bloqueo del ala socialista a reformas progresistas ambiciosas. Pero, sobre todo, esa estrategia posibilista aparecía como incompatible con la participación significativa de Podemos, sus líderes y su base social, que se aventuraba irrelevante, y a quienes había que dejar en una posición inoperativa y marginal. Se afianza un enfoque antipluralista, obstáculo principal para la cooperación unitaria y la recomposición del espacio.


El liderazgo de Sumar infravalora la articulación de una estrategia transformadora consensuada, con respeto y reconocimiento de todo el pluralismo existente, que permitiera concitar una mayor credibilidad transformadora y una capacidad democrática de convivencia y representación conjunta…


Si no se acierta sobre la salida de la encrucijada en 2027 y se produce la bifurcación completa de caminos, con una previsible derrota colectiva, se iniciará otro ciclo de recomposición de la izquierda alternativa y sus liderazgos. Ante esa experiencia, solo cabe una reflexión compartida, con una reorientación política negociada y una representación democrática y plural.”



Referencia web original:

https://www.nuevatribuna.es/articulo/actualidad/sumar-trayectoria-fallida-renovacion/20250114085015234292.html

Resistencia: situación trágica, mal menor y voluntad transformadora. Antonio Antón, en Rebelión (10/01/2025) y en Mientras Tanto nº 242 (1/02/2025)


Ensayo sobre varias cuestiones teórico-estratégicas controvertidas en la tradición de las izquierdas: La resistencia en condiciones trágicas, la ambivalencia de la opción del mal menor, tres grandes experiencias históricas, y la diferenciación entre adaptación, resistencia y voluntarismo. Selecciono varios párrafos:


“La cultura política de las izquierdas todavía está influida por esas experiencias, y sus tres fundamentos de adaptabilidad resignada, resistencia en condiciones trágicas y voluntarismo idealista e impotente, impactan en las decisiones estratégicas de los grupos progresistas.


Por tanto, ante este tipo de relaciones de fuerza desventajosas y a la defensiva inmediata, las fuerzas alternativas y de cambio de progreso, más allá de los discursos gramscianos de la guerra de posiciones y la guerra de movimientos, inspirados en la lejana experiencia de la Primera Guerra mundial, deben combinar esta conciencia trágica junto con la capacidad de resistencia transformadora no de resignación: resistencia, flexibilidad y adaptación ante dificultades extremas para conformar una salida recuperadora del bienestar público y el reequilibrio anterior de fuerzas sociales.


Así, frente a un análisis realista y una estrategia transformadora caben dos tipos de desorientación basados en una percepción irreal de la situación: Uno, derivado de la simple adaptación o resignación (salvando algunos muebles), de carácter moderado; otro, voluntarista o subjetivista, de carácter izquierdista, de intentar superar unas relaciones de poder vía discurso o programa, sobrevalorando su potencial articulador, lo que depende, sobre todo, de la disponibilidad y el refuerzo de fuerzas sociopolíticas sustanciales para pugnar por el cambio…


El llamado ‘mal menorismo’, como opción resignada y adaptativa al mal menor, con su justificación embellecida, no es una opción transformadora. El voluntarismo subjetivista, con la desconsideración de las constricciones reales y las posibilidades inmediatas de cambio, también lleva a la impotencia transformadora. Ante unas condiciones trágicas, a corto plazo, siempre es necesaria una estrategia de preservación y acumulación de fuerzas sociopolíticas para modificar el marco de la relación de fuerzas y ensanchar el marco de lo posible… para hacer posible el cambio.


Pero es en el mientras tanto defensivo cuando, a veces, hay que aceptar un mal menor como única opción para evitar un mal mayor, en este caso la destrucción de las fuerzas imprescindibles para continuar la acción resistente y transformadora, configurada como el bien a salvaguardar, tras la tregua pactada. Los dos riesgos de esa paradójica doble posición, la adaptación e incorporación a una dinámica continuista y la salida subjetivista de quedar en el limbo ideal del discurso, confluyen en una misma consecuencia: la ausencia de la acción resistente preservadora de la capacidad transformadora, todavía más grave cuando las fuerzas contrarias son poderosas e imponen retrocesos.”



Referencia web original:

https://rebelion.org/resistencia-situacion-tragica-mal-menor-y-voluntad-transformadora/


Referencia web de la reedición en Mientras Tanto nº 242 (1/02/2025):

https://mientrastanto.org/242/de-otras-fuentes/resistencia-situacion-tragica-mal-menor-y-voluntad-transformadora/


Un año de transición política. Antonio Antón, en Nueva Tribuna (6/01/2025)


Un panorama social preocupante con un año de transición política para consolidar el campo socioelectoral propio, ante los dos siguientes años electorales. Selecciono un par de párrafos:


“Esta polarización política y mediática por implementar su respectiva gestión institucional, del Gobierno y las Comunidades Autónomas de distinto signo, es una realidad que va a configurar este año 2025. Tratan de sacar ventaja electoral para ganar las próximas elecciones generales y poder mantener -o modificar- el próximo gobierno y su orientación estratégica y corporativa…


De momento, en las actuales condiciones y sin un panorama de fuertes presiones sociales, sindicales y políticas por su izquierda, es difícil que el Partido Socialista apueste por el riesgo de perder el poder gubernamental con una convocatoria anticipada de las elecciones generales. Aunque siga sufriendo el desgaste promovido por las derechas y mientras no haya posibilidad de una moción de censura por la oposición de derechas, tal como afirman PNV y Junts, puede continuar incluso con la prórroga presupuestaria y escasa actividad legislativa. Por tanto, sin grandes variaciones, no hay elecciones anticipadas a la vista. Las estrategias de cada actor van encaminadas a gestionar sus respectivos intereses y mejorar sus espacios político-electorales para las elecciones de 2027. Estamos en un año de transición política.”


Referencia web original:

https://www.nuevatribuna.es/articulo/actualidad/ano-transicion-politica/20250104130819233987.html


Se reedita en Voces Críticas nº 49 (15/01/2025):

https://mailchi.mp/6443a27c7e10/boletn-voces-crticas-n-49-enero-2025-dedicado-a-las-trabajadoras-de-cuidados-y-otros-tema

Lo que trae 2025. Antonio Antón, en Público (5/01/2025)


El incumplimiento de las expectativas electorales, políticas y unitarias de Sumar junto con la encrucijada de las izquierdas. Selecciono varios párrafos:


“Así, el reto decisivo que condiciona la dimensión representativa y la gestión de progreso, presente y futura, es la capacidad de recomposición y unidad de la izquierda alternativa, con su condicionamiento hacia las estrategias del Partido Socialista y del conjunto de las fuerzas democráticas y plurinacionales. Me centro en ello…


En conclusión, está abierta la encrucijada de las izquierdas y la continuidad de un proyecto de progreso en una doble perspectiva: si se termina este ciclo sociopolítico e institucional de progreso, asentado en la participación cívica de estos quince años y un inicial espacio socioelectoral de más de seis millones de personas; o bien, si se reproducen suficientes energías sociopolíticas, partidarias e institucionales para reafirmar una senda democratizadora y de justicia social, con una representación política renovada y relegitimada…


Sin embargo, la amenaza principal, infravalorada por los socialistas, es la desactivación de las propias bases sociales y electorales de las izquierdas, por ausencia de una respuesta suficientemente transformadora respecto de sus graves problemas vitales que siguen siendo de justicia social y democratización. Así, aparece el gran problema de la desconfianza en las élites gobernantes y estales y a los propios partidos políticos -junto con los grandes medios de comunicación- con particular desafección institucional y tendencias abstencionistas, que afectan más a las izquierdas y que abocan a la victoria de las derechas.


En consecuencia, junto con mayor participación cívica, es fundamental la persistencia de esa izquierda alternativa con suficiente representación electoral y capacidad de empuje reformador progresista. Veremos si las izquierdas sociales y políticas encuentran -encontramos- la salida adecuada a esta encrucijada. La recomposición de sus liderazgos dependerá de ello.”


Referencia web original:

https://www.publico.es/opinion/columnas/trae-2025.html

El continuismo socialista. Antonio Antón, en Mientras Tanto nº 41 (1/01/2025)


Ensayo sobre la estrategia socialista aprobada en su reciente Congreso, así como sobre el sentido, el alcance y la interacción de los dos componentes fundamentales de la estrategia política de las izquierdas: resistencia y avance en condiciones y derechos sociales y democráticos para la ciudadanía. Selecciono varios párrafos:


“La orientación política está presidida por el pragmatismo que, dada la fragilidad de su representatividad parlamentaria, se puede resumir en ‘hacer de la necesidad virtud’ para garantizar la primacía gubernamental socialista. El cierre de filas en torno a su liderazgo persigue ensanchar su espacio político-electoral para mejorar su poder institucional, con una alusión genérica a algunas preocupaciones ciudadanas y sin mencionar la necesaria colaboración con sus socios actuales…


Resistencia es un concepto sociopolítico fundamental para las izquierdas. Hace referencia a una situación de conflicto social, con una fuerte presión de los grupos poderosos y las derechas extremas. No es casual que, actualmente, vuelva al debate público, incluso resuene en el ámbito socialista y guíe una parte de su actitud. Son evidentes las estrategias derechistas de acoso político, mediático y judicial contra el Partido Socialista, como ayer lo hicieron contra Podemos y los independentistas. Ante esa ofensiva es necesaria una buena defensiva… pero no solo. Resistencia se opone a pasividad o resignación. Es una actitud activa para impedir un retroceso y, al mismo tiempo, preparar el avance…


En definitiva, respecto de la resistencia, el problema que nos encontramos no es su exceso sino su insuficiencia. Adquiere una gran dimensión en los relatos y la polarización discursiva a efectos de legitimación político-electoral frente al bloque de las derechas, confiando que es en ese campo en el que se producen los cambios de mentalidades y actitudes. Pero la propia dirección socialista se va dando cuenta que es insuficiente y debe afrontar lo que viene anunciando y ha rehuido: una completa y profunda regeneración democrática.


La pugna no es solo retórica sino de poder democratizador y transformaciones sustantivas, en particular para el bienestar de las mayorías sociales. Conlleva la confrontación con los resortes de poder fáctico -político, mediático, judicial, económico- que impiden el avance democrático y social, auguran el cierre del ciclo de progreso y la subordinación de las fuerzas de izquierda, así como, cuestionan su propia primacía política en un imprescindible bloque progresista, democrático y plurinacional. Resistir para avanzar.”


Referencia web original:

https://mientrastanto.org/241/ensayo/el-continuismo-socialista/